Mucho se discute acerca de cuándo se inicia la vida, lo cual es válido, pero no sólo desde el punto de vista de la ética, de la filosofía o desde el culto y las distintas creencias, sino desde la biología.- Es un hecho tan natural la procreación que durante mucho tiempo los investigadores no se detuvieron a pensar que desde los gametos que provienen de dos personas con una historia de vida diversa que impactó sobre ellos, en especial en la mujer, hasta el embrión desde el momento mismo de la implantación, todos los eventos de esa vida intrauterina deja en ese futuro niño-adulto una impronta imborrable no corregible de por vida.
Datos epidemiológicos, y provenientes de estudios clínicos y experimentales, indican que la experiencia vivida en tempranos momentos del desarrollo, tanto antes como después de nacer, juegan un rol decisivo en la aparición de enfermedades crónicas: enfermedades coronarias, diabetes, enfermedades isquémicas, osteoporosis, enfermedades metabólicas, y muchas más; día a día los investigadores van descubriendo que los efectos perinatales dejan huellas imborrables.
Cómo se explicarían estos cambios?. Todos tenemos una carga hereditaria (genoma) que hace a nuestra historia familiar, pero no todo lo que está escrito en ese código génico se va a expresar: el medio ambiente, ya sea el intrauterino como el extrauterino, modulará la expresión de esos genes que llevamos impresos, permitiendonos un desarrollo saludable o, de lo contrario, si ese medio ambiente es adverso, nos dejará la impronta para futuras alteraciones en la salud.
Los acontecimientos perinatales, o sea aquéllos que se producen alrededor del nacimiento, dejarán esas improntas, que serán independientes a lo que la persona experimente en la vida adulta.
La desnutrición en el recién nacido se presenta en una alta proporción, ya sea por enfermedades maternas como la hipertensión, las metabolopatías, las enfermedades autoinmunes que impiden el normal crecimiento fetal intraútero y da lugar a un neonato con grave estado de desnutrición.
Ahora bien, qué pasa con estos niños en el futuro? Puede que pertenezcan a un hogar de clase media con padres que estén atentos a su estimulación precoz y una alimentación adecuada para recuperar en nutrientes el peso de la adversidad intrauterina, o, por el contrario, son retirados de los centros asistenciales por padres que por diferentes motivos pero en especial por carencia educativa, social u económica, no llevan a esos pequeños con el cuidado esmerado que merecen y estos pierden la posibilidad de desarrollar su potencial intelectual ya que las interconexiones cerebrales se forman en etapas tempranas del desarrollo extrauterino, y, por ende, estarán en inferioridad de condiciones para enfrentar el día a día en su futura vida adulta.
En resumen, nos encontramos antes dos escenarios que marcan a fuego a los niños:
1. La Vida intrauterina: en ella no son sólo las enfermedades de la madre que pueden afectarlo, sino las vivencias que esa madre puede padecer durante su embarazo, las situaciones estresantes, los conflictos de pareja, las necesidades económicas, el desconcierto ante la futura maternidad no esperada.- Estas situaciones generan la producción de sustancias en el organismo materno que atraviesan la placenta o sea la barrera entre madre e hijo e impactan sobre esa estructura central que hace a nuestro ser que es el genoma y la carga génica, produciendo, no solamente improntas de futuras enfermedades en su vida adulta, sino y quizá lo más importante, impacta en su comportamiento ante la vida, desde el desarrollo inicial del apego materno hasta la posibilidad de la aparición de conductas autistas.
2. la Vida Extrauterina: los recién nacidos con signos de desnutrición intrauterina que a su vez no presentan un buen seguimiento postnacimiento y por ende la no recuperación física y el déficit de interconexiones intracerebrales irrecuperables ya que son de la primera etapa de la vida y marcan el potencial intelectual futuro de ese niño
Ante este panorama qué podemos hacer?
1ro: conocer fehacientemente de qué población estamos hablando.
2do: investigar el impacto de las situaciones estresantes maternas sobre las conductas futuras de adaptación del niño.
Para conocer la población de niños con restricción del crecimiento intrauterino y bajo peso al nacer contamos con estadísticas de las base de datos de los nacimientos, pero la faceta débil es el seguimiento, saber qué pasó con estos niños por ejemplo en su ingreso a la escuela primaria, y poder medir cuántos lograron un desarrollo armónico en lo físico y en lo psíquico y cuántos no lo alcanzaron y porque.- Es un arduo trabajo que se podrá llevar a cabo a través de bùsqueda de datos al nacimiento y seguimiento con encuesta en los hogares donde habitan actualmente.
Esta ùltima es la población sobre la cual se deben aplicar los programas de asistencia social, no sólo en lo económico, sino en el apoyo educativo de la familia en contacto con el niño, el conocer y seguir sus necesidades que hicieron que no se lograra el desarrollo esperado para esos niños.- En conocimiento de los factores gatillo de estas situaciones de abandono y falta de recuperación, aplicar los recursos necesarios para apuntalar esas familias e impedir que esos niños queden marginados de la sociedad.
En relación a la situación de estrés materno, las investigaciones, algunas en marcha, marcarán el real impacto de ello sobre el futuro niño, el cual hoy conocemos en forma intuitiva, sin un método científico para poder medirlo.
Finalmente, es sabido la importancia de la madre en el cuidado, crianza y educación de sus hijos.- Las leyes laborales entre otras deben reconocer la necesidad de que las madres que hoy trabajan para llevar el sustento a su hogar, deben tener horarios y retribución económica acorde al importante e imprescindible rol al lado de sus hijos.